El pueblo Batwa o Twa, es un pequeño grupo étnico también conocido como Pigmeos Batwa. Durante cerca de 60.000 años y hasta hace muy poco, estes pueblos vivían como cazadores-recolectores y en armonía con su entorno en los frondosos bosques ecuatoriales de la zona de los grandes lagos, un territorio localizado entre las fronteras de Ruanda, Congo y Uganda.
En los últimos siglos, la superficie de estos bosques se redujo considerablemente para crear nuevas zonas de cultivo, permaneciendo pequeñas porciones de selva aislada. Esto afectó fuertemente tanto al pueblo batwa como a toda la biodiversidad, pero en 1992, tras declarar Patrimonio de la Humanidad al bosque de Bwindi, la vida de los Batwa, en el sur-oeste de Uganda cambió para siempre. El objetivo era proteger 350 gorilas de montaña en peligro de extinción que vivían en los límites de este bosque. Por lo que los Batwa fueron desalojados del parque sin tener lugar a donde ir, sin tener posesión de ninguna tierra y sin recibir ninguna compensación.